Fraude Indocumentados - En California, Jorge Mario Cabrera, director de comunicaciones de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes de Los Angeles (CHIRLA), dijo que el fraude existe “y hasta una persona muy conocida puede jugarle sucio si no es usted cuidadoso”.
El activista recomendó tener siempre en cuenta lo siguiente para prevenir el fraude:
No hable de su estado migratorio con extraños, al menos que sean personas de confianza o conocidas en la comunidad.
Antes de buscar ayuda con un notario o un abogado de inmigración, ponga atención a los noticieros confiables o visite una organización en la comunidad en la que usted confia. Ellos seguramente estarán pendientes día a día del progreso de una posible ley migratoria.
No pague a nadie por adelantado ni un centavo por “agregarse a la línea de espera” o “empezar su proceso”. Eso no existe y significa que alguien le quiere tomar el pelo.
Hable con vecinos, amigos, y conocidos acerca de profesionales legales que son de confianza. No visite al primero que se le ponga en frente.
La reforma migratoria será un proceso muy difícil, costoso, y tardío. No será nada fácil y quien le diga lo contrario no sabe lo que está diciendo.
Asegúrese de compartir esta información con amigos y vecinos para que nadie sea víctima de fraude.
Usted puede empezar a prepararse en la privacidad de su casa, colectando y catalogando documentos importantes que le puedan ser útiles más tarde en caso de que se apruebe una reforma migratoria y usted pueda calificar. Colecte y guarde desde ya documentos originales o copias como pagos de impuestos, cuentas de banco, archivos médicos, cartas de empleadores, aplicaciones para crédito, fotografías con fecha, títulos y certificados, premios ganados, licencias de manejo, pagos de servicios en casa, contrato de arrendamiento, etc.
No crea todo lo que escucha. Si es necesario verifíquelo con dos o tres lugares de confianza. Si algo parece que es muy bueno, es posible que haya gato encerrado.
Los casos de abuso por fraude pueden reportarse a la policía pero muy raramente se le regresa el dinero a las víctimas. Los sospechosos son muy inteligentes y no se dejan agarrar tan fácilmente.