Los Casos de Falta de Seguridad se originan cuando una persona es víctima inocente de un acto violento ocurrido en la propiedad de otra persona.
El delito podría ser un ataque o agresión sexual en un lugar público o privado. En muchos estados, todo propietario tiene la responsabilidad de proveer un entorno razonablemente seguro. Los propietarios tienen una mayor responsabilidad aun para con las personas que visitan su establecimiento por cuestiones comerciales.

Los propietarios tienen la responsabilidad de proveer condiciones de iluminación y medidas de seguridad apropiadas de acuerdo a las circunstancias. Si ya ha ocurrido un delito de violencia en las instalaciones, o ha habido amenazas de violencia, el propietario puede tener una mayor responsabilidad. No cumplir con estas condiciones podría constituir negligencia.

Los casos por falta de seguridad suelen ser largos y complejos. Se requiere de una investigación minuciosa para estudiar el área donde se cometió el delito y determinar hasta qué punto el propietario conocía las potenciales amenazas. Esto podría demandar los servicios de un investigador privado y expertos en seguridad. A menudo, los actos delictivos quedan registrados en las grabaciones de las cámaras de vigilancia. Es fundamental actuar rápido para asegurar que estas cintas se preserven como prueba en el futuro.

Si usted ha sido víctima de un acto de violencia ocurrido en la propiedad de otra persona, procure asesoramiento legal de inmediato. Si ha sufrido daños físicos y psicológicos graves, no debe demorar en contratar a un abogado. Tenga en mente que en algunos estados, hay una ley fija que da un plazo para presentar una demanda