Para el soltero que aún no conoce el amor, el tema resulta muy lógico y realista pues de estas cosas se trata la vida.
En cambio, la persona enamorada muchas veces queda cegada a tales cosas y reacciona con, "Estoy seguro que otras parejas tienen que pasar por problemas y ajustes difíciles una vez que se casan. ¡Pero nosotros no!" Y el individuo ya casado fácilmente pudiera comentar, "¿Cómo pude ser tan ingenuo? ¡Y nadie me lo advirtió...o no le creí! Ahora, ¿qué haremos?"
Cuando un hombre y una mujer entran en una relación tan íntima como el matrimonio, descubren 50 ajustes y problemas. Las razones son variadas. El mero hecho que son del sexo opuesto les da reacciones, ideas, emociones, valores, ambiciones, deseos y puntos de vista que no solamente se distinguen, sino que a veces también se oponen.
Añadimos el hecho que vienen de dos distintas familias, y aumentan las diferencias. Luego existen las diferencias que resultan de distinciones económicas, escolares, religiosas y ambientales.